"Estoy harta de ser la única que limpia en esta casa". Cuantísimas veces habrá dicho eso mi madre y ahora mejor que nadie me doy cuenta de ello. Porque estoy harta de vivir entre mierda, sí mierda. Al menos mi habitación la tengo bien pero en el resto de la casa la mugre se está apropiando de todo. El cuarto de baño, ese sitio dónde uno se asea, ese sitio que debería estar 'como los chorros del oro' y que solo llega a estar así cuando YO lo limpio. Por no hablar de la cocina un sitio que debería estar limpio porque es donde se come, donde vosotros, guarros, parece que os sentís como en el paraíso bueno en especial tú CERDO. Todavía no te he visto coger un trapo más allá que para sacar un plato del horno, al menos le has pasado la aspiradora a tu habitación. Y es que estoy tan cabreada que ya no podía más. Pero hablemos de mi cocina, por fortuna pocas son las veces en las que he tenido que cocinar con la cocina tal y como está ahora, a día de hoy Marta V. puede dar también testimonio de ello, la pila de platos sucios ha colmado mi paciencia y espero que mañana estén limpios (puedo esperar sentada porque de pie puede que me canse). Pero nada que seguro que mañana limpio los fogones eso sí con guantes y la encimera, ¡Dios Santo! Creo que esa encimera solo ha visto un trapo las veces que yo se lo he pasado, sí me siento como un ama de casa. He visto de todo, y cuando digo TODO es todo. El único consejo, bueno, no conviváis con gente que no conocéis previamente y si no los conocíais que sean italianos que son los únicos que parecen más limpios.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario